Las comunidades de aprendizaje representan un modelo de educación orientado a la práctica y la cooperación. Se trata de una iniciativa muy relacionada con la innovación educativa, centrada en principios de comunicación, participación y cooperación, donde destaca el valor educativo de formar parte de una comunidad. La adquisición de conocimientos prácticos se consigue a través de la aplicación de diferentes recursos y la interacción entre los miembros del grupo, que comparten conocimientos y experiencias.
Comunidades de aprendizaje
El modelo educativo propuesto por las comunidades de aprendizaje, fundamentalmente en educación primaria y educación secundaria, consiste en transformar el centro educativo y romper sus límites. Requiere un cambio no sólo en el papel de los docentes, sino también en el de las familias y por supuesto el del alumnado. Como ocurre en el caso de la propuesta de aprendizaje-servicio, la comunidad se convierte en el eje fundamental del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Se pretende que cada alumno y alumna llegue a desarrollar al máximo sus capacidades a través del trabajo colaborativo. Su autoestima se ve reforzada porque todos los miembros de la comunidad de aprendizaje muestran su confianza en lograr ese objetivo individual, no un aprobado frente a un suspenso.
Además de un cambio sustancial en el enfoque de gran parte de los procesos de enseñanza-aprendizaje, las comunidades de aprendizaje requieren la adopción de herramientas y entornos abiertos y flexibles. La clave es el objetivo de transformación desde principios de participación y el ejercicio de valores.
Los pilares de la transformación
- Convivencia: Junto al éxito educativo se persigue la creación de un espacio de convivencia.
- Igualdad: Cualquiera de los miembros de la comunidad es inteligente para aportar sus argumentos. Todos merecemos las mismas oportunidades.
- Inteligencia cultural: La inteligencia se enfoca desde un planteamiento más amplio. No sólo abarca lo cognitivo o académico. Se destaca en su desarrollo la importancia de la interacción social, la experiencia y la integración en el contexto sociocultural. El potencial de nuestra inteligencia social se consigue al interacturar y aprender de los demás.
- Diálogo: Se presta atención a las intervenciones y aportaciones de todos los miembros de la comunidad de aprendizaje. El valor de las aportaciones radica en la argumentación, al margen de cualquier situación de autoridad jerárquica.
- Mayor número de interacciones: Además del profesorado, intervienen en los llamados «grupos interactivos» padres, madres y otros adultos que forman parte del entorno social del alumnado. Por ejemplo, pueden intervenir profesionales relacionados con el área y equipos de voluntarios.
- Evaluación continua: A través de comisiones que orientan el desarrollo del proyecto.
Para saber más
- Andalucía es una de las Comunidades Autónomas donde más centros llevan a cabo experiencias participativas de comunidades de aprendizaje. Por ello, la Consejería de Educación creó la Red Andaluza de «Comunidades de Aprendizaje». A través de una Orden se regularizó el procedimiento de inscripción a esta Red.