Uno de los cinco enfoques de la nueva Ley de educación consiste en «conceder un papel central al desarrollo de la competencia digital». Se insiste en integrar la tecnología desde una comprensión global por su impacto social, sus implicaciones éticas y en general por su importancia en la nueva realidad. El objetivo es «modernizar» y «ampliar» el enfoque de la competencia digital, tal y como establecen las «recomendaciones europeas». ¿Qué aspectos se destacan en la LOMLOE en relación a la transformación digital? ¿Qué papel desempeña el Plan Digital del Centro y cuál es la relevancia de la llamada «brecha digital»?
Son constantes las alusiones en la nueva Ley a la competencia digital, a los contenidos relacionados con tecnología y digitalización, y también a la «cultura digital«. En concreto, se reconoce la importancia de las implicaciones de la tecnología relacionadas con sus peligros y la importancia de los valores:
- la garantía de los derechos digitales
- el uso seguro de los medios digitales
- los riesgos de la inadecuada utilización de las TIC
- la eliminación de estereotipos de género que dificultan la igualdad en la adquisición de esta competencia
La brecha digital
Todo ello pretende ser regulado desde una situación reconocida de «brecha digital». Porque los jóvenes, según se recoge en el preámbulo de la LOMLOE, «viven cada vez más es ese nuevo hábitat digital». ¿Es posible eliminar o reducir esa brecha digital con ayuda de la formación en digitalización, promovida por las Administraciones educativas?
Lo cierto es que la educación, por su complejidad y la diversidad de actores que intervienen, no puede alcanzar la misma velocidad en su proceso de transformación digital, a pesar del valor que le concede la LOMLOE. De ahí que la brecha sea cada vez más grande. Conviene reflexionar sobre la distancia existente entre el alumnado nativo digital y la mayoría de los otros miembros de la comunidad educativa. Se trata de un aspecto clave que debe recogerse en cualquier Plan Digital de Centro.
En su práctica diaria y su constante evolución, la actualización se convierte en un fin en sí mismo. Pero los alumnos nativos digitales llevan una gran ventaja a los docentes porque ya han interiorizado la aplicación de la tecnología en su día a día y por lo tanto también en su manera de aprender. Para prepararse una prueba pueden ver decenas de vídeos, antes de que nadie les haya hablado de las «píldoras formativas audiovisuales» o de Flipped Classroom o de clases online. También de forma natural recurren a un buscador para acceder a un vídeo de un profesor de México que les habla de los aztecas desde Teotihuacán.
Y, lo que es más revelador, es muy posible que un streamer ejerza sobre los nativos digitales más influencia acerca de los derechos y deberes del ciudadano que su profesor de Ética.
Para saber más
- Texto Ley Organica 3/2020
- Sección del blog dedicada a la LOMLOE